Hace poco menos de dos años repetía un cuento en particular. ¿El autor? Un marginal de la literatura, un condenado a mirar la tertulia desde afuera, a través de la ventana. Merecimientos no le faltan para entrar por la puerta principal, porque tiene el lenguaje en su poder y es un hábil espadachín con la ironía. Pero no deja de ser un outsider en el mundo de las letras, muchas veces tan afecto no al ser sino al parecer. Quizás sean la demasiada calle y su apología, cierto aire de compadrito que sin embargo no puede o no quiere disimular los vahos tibios de la melancolía, las causas de su proscripción.
Seguramente algún día se hará justicia con Alejandro Dolina, de él se trata. Conductor de ciclos míticos ("Demasiado tarde para lágrimas" y "La venganza será terrible": qué buenos títulos, ¿no?), y autor de un libro del que mucho se habla pero no muchos han leído, lugar común para las grandes obras. De ese volumen, "Crónicas del Ángel Gris", rescato uno de mis cuentos preferidos, al que cuelgo por tercera o cuarta vez. Ciertamente, ya perdí la cuenta.
6 comentarios:
He de confesarte que desconozxco al autor del que hablas.
Saludos
no te preocupes amigo. El solo tiene relevancia fronteras adentro de Argentina jeje
tengo "bar del infierno", esta bueno, por ahi muy melancolico de una manera particularmente porteña, pero igual es un gran libro.
la melancolia del tango, digamos
Es cierto gran escritor y estupendo conductor no olvido las noches de la venganza será terrible.
Saludos
confieso que lo escuche apenas un par de veces, pero concuerdo en que es (o era, lo siguen emitiendo?) un programa excepcional.
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